¿Sabe usted qué es el Bullying?
#NoMasBullying – agosto 14 2013

¿Sabe usted qué es el Bullying?

El bullying es un fenómeno social que día a día se evidencia más en las escuelas venezolanas. Un análisis realizado por Cecodap a 300 estudiantes constató que un 40 por ciento de los encuestados tenía conocimiento de esta situación en sus salones de clase.

El bullying o acoso escolar es la exposición de un estudiante, en forma repetida en el tiempo, a acciones negativas que causen daño o incomodidad por parte de otro o varios estudiantes (Olwes, 1993). Para el abogado Carlos Trapani, Coordinador del Proyecto Buen Trato de Cecodap, el bullying es cuando un estudiante más fuerte y poderoso daña o amenaza con hacerlo a alguien más pequeño o débil de manera deliberada una y otra vez. “Estas agresiones pueden manifestarse en infinitas formas como: golpes, empujones, amenazas verbales y/o físicas, exclusión intencional de un grupo, gestos de amenaza, insultos, esparcir rumores, entre otros”.

El especialista explica, que  este fenómeno social es causado por una asimetría de poder y dominio,  donde una persona utiliza su poder (fuerza u otra condición) para intimidar u hostigar a otra. Trapani asegura que: “Es una forma de violencia que se da en cualquier ámbito de socialización donde se encuentren los niños, no sólo se limita a la escuela. Evidentemente la escuela es el lugar donde mayor tiempo están,  pero también se pueden dar situaciones de acoso en grupos deportivos, culturales y comunitarios”.
Aunque en Venezuela no hay datos oficiales sobre el acoso escolar, Cecodap realizó en el año 2008 un análisis cualitativo con 300 estudiantes de los últimos niveles de educación básica y diversificado de la ciudad de Caracas, en el que se constató que un 40 por ciento de los encuestados tenía conocimiento de este tipo de maltratos en sus salones de clase.

El bullying no debe confundirse con peleas ordinarias entre niños o adolescentes con características más o menos similares, ya que en los casos de intimidación escolar hay abuso de poder, que difícilmente termina sin la intervención de un adulto.

¿Quiénes son los Participantes del bullying?

Según el abogado Carlos Trapani los actores se dividen en:

• El agresor o victimario: Generalmente son niños que quieren liderar grupos, ser reconocidos, el acoso escolar se da indistintamente del sexo. Generalmente, ese victimario es una persona que busca reconocimiento y aceptación. En muchos casos tiene antecedentes de abuso en su núcleo familiar.

• La víctima: En relación a las víctimas son generalmente niños muy sumisos, callados, introvertidos, con problemas de autoestima que probablemente  también provienen de entornos violentos. Al igual que el victimario el  género no es determinante.

• Los observadores o testigos: es toda persona  que no está involucrada ni como víctima ni como victimario en el acto de la agresión, pero que lo presencia.
¿Cómo prevenirlo?:

Recuerde que  ninguna forma de violencia es justificable. A continuación le ofrecemos una serie de recomendaciones para evitar el acoso escolar:

• Conocer y escuchar a los niños, niñas y adolescentes para abordar adecuadamente temas como el bullying.

• Dedicarles tiempo de calidad para que se sientan importantes en la familia, queridos y en confianza. 

• Estar atento a cualquier señal que refleje una situación de violencia, ya sea no querer ir a la escuela, cambios de rutina o ánimo en el niño, niña y adolescente.

•  Orientar al niño, niña o adolescente para que se comunique con sus padres o con su representante en caso de sufrir acoso, e informarle donde debe acudir para buscar ayuda.

• Canalizar ante los Consejos de Protección de Niños, Niñas y  Adolescentes cualquier caso de amenaza o violencia a sus derechos.

La mayoría de los niños en edad escolar ha vivido este fenómeno social, ya sea como víctima, victimario o testigo. Lo importante es que cualquier tipo de intimidación, por inofensiva que parezca, debe ser definida como inaceptable por todos.

Trapani argumenta que la principal solución es reconocer que la violencia es prevenible. “Hay que darle espacio a los problemas afectivos de los niños y adolescentes. Los padres deben estar alertas y muy atentos al comportamiento de sus hijos. Asimismo, la formación del docente es clave para identificar este tipo de violencia y es fundamental que la escuela disponga de mecanismos para abordar estas situaciones”.